No suelo subir este tipo de contenido al blog, que esta más dedicado a documentar mis viajes y carreras, pero en este caso creo que puede ser interesante, porque la Mondraker es una bici de la que se encuentra bastante menos información en la red. Igual que poco queda por añadir sobre una Orbea Alma, sobre las F-Podium cuesta encontrar cosillas, más allá del primer boom de reviews cuando fue presentada.

La review la vamos a partir en 4 partes, montaje con peso, algún apunte de geometría y comportamiento y conclusiones que saco después de mes y medio con ella y haberla metido en más o menos por todos los terrenos en los que pienso usarla.

Comenzamos con montaje y peso:

• Cuadro: F-Podium 2020 100mm Talla M
• Horquilla: Fox Stepcast Performance 2020 100mm
• Ruedas Mavix Crossmax 2020 25mm de interior
• Grupo GX menos mando NX
• Frenos XT con discos RT-54
• Cubiertas Maxxis Recon Race 2.25
• Sillin GUB 135g
• Manillar Procraft PRC 760mm 185g
• Puños espuma Procraft 30g
• Tija 450mm Woodman 200g
• Potencia Mondraker 125g
• Pedales Crackbrothers Candy 1 285g
• Botellero Procraft 25g
• 75ml por rueda
• Peso de la bici 11.42kg 

Peso correcto si tenemos en cuenta que las ruedas pesan 2kg, llevamos un GX y cuando pasemos al juego de ruedas de carbono que se merece la bici, junto a unos discos Galfer, estará entorno a los 10.7kg, lo que me parece un peso muy bueno relación montaje/peso/precio pagado por la bici. 

El sistema es complejo

Pasemos a la geometría, que como buen freak de las bicis, es una de las cosas que mas me gusta del modelo. En si, lo que tenemos en la F-Podium es la geometria Fordward de Mondraker llevada a una doble de XC. La bici es larga, bajita y tumbada, un "long&slack" que dicen los ingleses.

¿Dónde destaca esta bici? Pues hace 1 año, en el momento de su presentación, prácticamente en todas sus cotas, hoy en día y tras las presentaciones 2021, muchas marcas como Specialized, Cannondale o Ghost han seguido por el mismo camino. Si queremos remarcar algún dato de la geometría, los más extremos son el Reach de 460mm en talla M (laaaargo), un ángulo de sillín muy vertical de 76.5º y una pipa muy racing de solo 90mm. El resultado es una bici que hay que probar para ver que el concepto funciona y funciona muy bien. 

El tener un Reach tan largo puede inducir a pensar que estamos ante un caballo de bici, pero nada más lejos de la realidad, en talla M viene con una potencia de 50mm, lo que una vez puesta la bici a mi medida me deja una distancia sillín manillar de 52cm, que es exactamente lo mismo que llevaba en la Alma 2018, una bici que presenta un Reach de solo 415mm es decir 4,5cm menos, ahí es nada. 

Mencionar que el mismo cuadro, con sus 100mm de recorrido se vende también con horquilla de 120mm lo que deja el ángulo de dirección en 66.8º y potencia el lado trail que sin duda tiene esta bici. 

En cuanto al paso de rígida a doble, pues como todo, tiene sus cosas malas: pesa más (entorno a un kilo actualmente), llevará mas mantenimiento, se pierde "reactividad". Pero también tiene otras muchas cosas buenas: comodidad, tracción, seguridad en las bajadas. No os voy a contar nada nuevo, han corrido ríos de tinta sobre la elección de una bici doble o rígida. Lo que si que me queda claro, es que si tiene un nivel decente y quieres una doble, tiene que ser una buena doble (€€€€) ya que si no, por el peso y componentes se diluyen las ventajas de la misma. La Alma era una muy buena bici, capaz de ir prácticamente por los mismos sitios que la Mondraker y en manos de un piloto mejor, por más de los yo era capaz. 

Pasemos ahora a comentar como funciona la bici y creo que la mejor forma de definirla es decir que es una bicicleta que hace fáciles las cosas difíciles, cuanto más complicado se pone el terreno mejor se va a comportar la bici, realmente reluce en terreno roto, en escalones, en bajadas sueltas, en general allí donde querríamos una doble la F-Podium cumple con creces.

El sistema de suspensión viene con un mando de bloqueo de dos posiciones, todo abierto o todo cerrado (horquilla y amortiguador a la vez) de entrada se tiende a pensar que va a ser necesario un mando de 3 posiciones, para buscar esa posición intermedia, pero nada mas lejos de la realidad. El sistema de pivote virtual o doble bieleta que monta la bici, hace que una vez ajustada no tengamos apenas contaminación en el pedaleo y al final yo acabo usando el bloqueo en asfalto y en contadas ocasiones fuera de el. 

La bici la he ido metiendo en todas mis rutas habituales, pista, sendero, subidas rotas y sueltas... También he hecho tres o cuatro salidas a rutas cercanas, mas trail, entre ellas un par de rutas en Ainsa  Zona Zero que ya conocía. 

Subiendo es una bici que tracciona mucho, da una tracción en terrenos rotos y escalones muy parecida a la que te daría una bici de trail. La posición es muy buena dado que el ángulo de sillín nos coloca sobre el pedalier listos a pisar los pedales. Como contra, yo al venir de una Alma, pues noto esa perdida de reacciones que te da la rígida. La F-Podium bloqueada es una tabla, pero como ya digo el 90% del tiempo subes abierto y sin casi o sin contaminación.

En llano, es una bici rápida y que invita a ir dando cera a los pedales, aquí yo creo que las sensaciones son las mismas que siguiendo con Orbea, te puede dar una Oiz o cualquier otra bicicleta de rally. Viniendo de una rigida, las pistas rotas son otra historia, pasas de ir dando botes en el sillín a ir dando pedales sin que las piedras te cambien la posición encima de la bici.

La bajada debería ser el punto fuerte de una doble y en este caso y con el ADN de la marca, que respira enduro y DH, no podría ser de otra manera. Realmente ese manillar palo de escoba, esa potencia de 50mm y ese ángulo de 68ºmm hacen que cuando llegan las bajadas, la bicicleta se comporte de forma increíble. La bici baja muy muy estable, en zonas empinadas se tiene un control muy bueno de la bici, en escalones da una seguridad brutal, puedes moverte muy bien encima de la bici... Con 120mm y una tija telescópica se convertirá en una bomba muy muy divertida. En mi caso de momento seguirá en configuración maratón con sus 100mm y tija rígida. Realmente la bici va tan bien que en zonas complicadas pero no enduro no hecho de menos una tija, que la bici ya da una muy buena seguridad. 

Es una bici que invita a pasarlo bien bajando, a saltar en los cambios de rasante, a pillar zonas rotas, a subirse a los peraltes, ahí sale a relucir su herencia endurera. 

Si nos ceñimos al rendimiento puro y duro... Tirando de Strava no voy mas lento que con la Alma, ni subiendo ni llaneando. Subiendo algunos tramos a tope, he marcado PR y bajando pues la lógica se impone y a nada que fuerzas es muy fácil bajar los tiempos que hacía con la rígida. En especial y vuelvo a lo mismo, cuanto peor es el terreno mas es la diferencia a mejor de la F-Podium.

Lo dicho es una bici que hace fácil y lo difícil y.... Ah! ¡Es muy bonita!

¡¡¡CUIDAROS BIKERS!!